Aquí te contamos 5 cosas que deberías saber sobre tu luna de miel, para que no te pillen por sorpresa:
1. OLVIDARÁS PLANIFICARLA. A diferencia de todos los planes que preparas en un viaje de vacaciones normal, es muy posible que te encuentres sin tiempo de preparar tu luna de miel en detalle debido a que la mayor parte de tus esfuerzos estarán dirigidos a planificar la boda -como es lógico-. Por eso, en este tipo de viajes, se opta muchas veces por el todo incluido en resorts hoteleros. No te preocupes, te lo pasarás de miedo igualmente.
2. NO SERÁS CAPAZ DE DISFRUTAR AL 100% DURANTE LOS PRIMEROS DÍAS. Cuando acabe la boda, tendrás tanta adrenalina recorriendo tu cuerpo que tardarás uno o dos días en volver a relajarte y sentir tu cuerpo descansado. Y es posible que a tu marido le pase igual. No te preocupes: sed cariñosos el uno con el otro y dejad que las cosas fluyan a su ritmo.
3. HABRÁ CONTRATIEMPOS. Como en todos los viajes. La clave está en no agobiarse por los problemas que puedan surgir con el hotel, los desplazamientos o los problemas de salud inesperados. Sed positivos siempre y no os dejéis abatir.
4. NO ESTARÉIS PRACTICANDO SEXO SIEMPRE. Seguro que hay alguna noche en la que a ti, a tu pareja o a ambos os apetezca más un plan tranquilo de cena romántica y película para descansar después de la excursión de buceo. Es normal. Daos el capricho de descansar del sexo para disfrutarlo cuando realmente os apetezca.
5. NO QUERRÁS VOLVER A CASA. Lógico: la vuelta a la realidad nunca gusta. Para combatir el bajón, empezad a planear el siguiente viaje o preparad un fin de semana divertido tras vuestro regreso.
