Cayetana Fitz-James Stuart (1926-2014), más conocida por su título de Duquesa de Alba, fue siempre una mujer llena de vitalidad, algo que demostró en su vida sentimental. Contrajo matrimonio en tres ocasiones, ya que nunca se resignó a vivir sin amor.
Su primera boda (a la que corresponde la imagen de arriba) tuvo lugar el 12 de octubre de 1947 en la catedral de Sevilla. La futura Duquesa de Alba -heredaría el título diez años más tarde- contrajo matrimonio, a sus 21, con Luis Martínez de Irujo y Artázcoz, hijo de los Duques de Sotomayor.
Fue aquella una boda tradicional y por todo lo alto, con gran afluencia de invitados poderosos y repercusión en la prensa internacional. Del matrimonio nacieron los seis hijos de la Duquesa. Desgraciadamente, en 1972, su esposo falleció de leucemia.
Seis años después de enviudar, el 16 de marzo de 1978, Doña Cayetana regresó al altar, esta vez acompañada por Jesús Aguirre y Ortiz de Zárate, un ex jesuíta aristócrata once años menor que ella. Estas segundas nupcias se oficiaron en la capilla privada del Palacio de Liria, la residencia de la Casa de Alba en Madrid (celebración a la que pertenece la foto siguiente).
Este también fue un largo matrimonio, casi tan largo como el primero (que duró 25 años, frente a los 23 del segundo). Una vez más, fue la muerte la única que pudo separarla de su marido, al fallecer este en 2001, víctima de un cáncer de laringe.
85 años tenía ella cuando decidió contraer matrimonio por tercera y última vez, en esta ocasión con Alfonso Díez, un funcionario 24 años más joven que ella a quien había conocido a través de su segundo marido. Los rumores de su relación comenzaron en 2008, y la boda se celebró el 5 de octubre de 2011, a la una de la tarde (foto inferior).
Doña Cayetana, quien lució un vestido rosa de estilo muy español diseñado por Victorio&Lucchino, demostró ante todo el mundo su vitalidad bailando una rumba nada más salir del Palacio de las Dueñas, propiedad de la Casa de Alba en Sevilla. Este último matrimonio concluyó el 20 de noviembre de 2014, con el fallecimiento de la propia Doña Cayetana.